16 Problemas sobre orgasmos que sólo las mujeres pueden entender

16 Problemas sobre orgasmos que sólo las mujeres pueden entender

Seguramente tú (al igual que todas nosotras) te has enfrentado a estos conflictos...

1. Cuando dices “no te detengas” y él cambia completamente lo que está haciendo. Dije, “no pares”, que quiere decir “no vayas más rápido, no lo hagas más fuerte, ¡sigue, literalmente, haciéndolo como lo estás haciendo!

2. Cuando tienes que cambiar de posición para que la suya esté en el ángulo correcto. “Me estoy moviendo para estar más cómoda, estoy quedando en un lugar que, de hecho, se siente realmente bien para mí.”

3. Cuando simplemente lo pierdes. ¡Estaba tan cerca! ¡Tan cerca! ¡Y no, no sé qué pasó!

4. Cuando finalmente llegas al orgasmo pero es lo más equis. Las blue balls son horribles. Pero este sentimiento es el peor de todos.

5. Cuando accidentalmente empiezas a imaginar a alguien que odias. Mira, por la razón que sea, eso nos llevará “ahí" más rápido. Nunca hables de esto otra vez, ese hombre es asqueroso.

6. Cuando te empiezas a imaginar a alguno de sus amigos. ¡Está mal, está muy mal! Y ni siquiera te gusta su amigo. Quiero decir, creo que un poco sólo cuando se ríe. Tiene una gran risa. ¡Ok, concéntrate! Puedes lidiar con tus sentimientos después del orgasmo.

7. Cuando empiezas a decir “está bien, no te preocupes”, porque al menos lo intentó. "¡Ay, no!, se sintió tan bien por un momento, estabas haciendo realmente un gran esfuerzo, probablemente sólo sea yo? ¡Sí, yo y el hecho de que eres malísimo en esto!

8. Cuando él piensa que se está luciendo, pero está completamente en el lugar equivocado. Sí, esa parte de mi muslo no necesita que se lo hagas, gracias.

9. Cuando terminaron y él se quiere acurrucar, y tú quieres dormir. A pesar de lo que diga la opinión popular, que esto no les pasa a las mujeres, y relamnete somos súper parecidas a los hombres, después de tener un orgasmo queremos una siesta libre de acurrucamientos.

10. Cuando tienes un calambre en la pierna, pero no te quieres mover porque podrías arruinarlo. Entonces sólo esperas a que tu pierna se duerma por completo, ¿a quién le importa?

11. Cuando su dirty talk tiene el efecto contrario. Creo que debimos haber hablado de esto antes, pero llamarme “mamacita” me dejó muy seca.

12. Cuando él esta muy entusiasmado con una posición realmente rara y tú simplemente no. ¿¿¿A quién le gusta esta posición??? ¿Su nombre era Samara? ¿Tenía una extraña mochila y usaba chalecos de tirantes? Quiero decir, esto es rarísimo, y nunca antes lo habías mencionado.

13. Cuando él está yendo demasiado rápido, intentas calmarlo y no funciona. Y tienes que recordarle suavemente que no tiene que bajarle al ritmo pero definitivamente, tú sí lo necesitas.

14. Cuando parte de ti sólo quiere dejarlo para poder irte a masturbar. Este es un triste pero maravilloso sentimiento.

15. Cuando él piensa que sólo porque él ya tuvo un orgasmo, el sexo se acabó. Ajá, buen intento...

16. Cuando tú -a veces, no muy seguido- realmente te rindes y los finges. Los hombres parecen pensar que las mujeres lo fingen para decepcionarlos. No. Nosotras lo fingimos para que dejen de hacer esa rutina que sólo lo hace parecer un mimo en una caja, que nunca iba a funcionar. Fingir es sólo una forma de hacer que dejen de hacer lo que fuera que estaban haciendo. Y, te dejamos la nota: Nunca lo finjas. Dile lo que quieres y si él no quiere hacerlo, probablemente no es el adecuado para ti. ¡Te mereces un buen orgasmo!

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