Las razones por las que los hombres llegan a simular orgasmos son muy parecidas a las femeninas
Aunque lo más común es hablar de las mujeres que fingen orgasmos, está comprobado que los hombres también lo hacen y las razones de ambos pueden no ser del todo diferentes.
Normalmente tendemos a pensar que la anatomía femenina requiere que la pareja se emplee a fondo y sea creativo y persistente para que ella llegue al éxtasis; por el contrario, creemos, en el caso masculino se trata de algo totalmente predecible e identificable.
¡Pues no es así! Un estudio de la Universidad de Kansas concluyó que el orgasmo de los chicos es igual de complicado que el de nosotras, requiere tiempo, dedicación y depende de varios factores.
A la hora de fingir, señalan las especialistas Charlene L. Muehlenhard y Sheena K. Shippee, encargadas de la investigación, los hombres tienen menos experiencia, pero la han ido adquiriendo porque las mujeres nos convencimos de la idea de que eyaculación es igual a orgasmo.
Aunque es altamente probable que ambas cosas ocurran al mismo tiempo, se puede eyacular sin sentir mucho y se puede sentir mucho sin eyacular.
En un artículo publicado en la revista Journal of Sex Research, las científicas agregan que hay hombres que simulan que ya eyacularon y les resultó muy placentero; incluso, esconden el condón para que su pareja no descubra la verdad.
Otras tretas a las que recurren son acelerar e intensificar sus movimientos, gemir, afirmar que están a punto de llegar, contraer los músculos y luego actuar como si estuvieran exhaustos.
Si aún te intrigan las razones por las que un chico armaría tal teatro, he aquí las que argumentaron en el estudio:
-Para terminar un encuentro sexual que no está siendo muy efectivo o que se ha extendido mucho tiempo.
-Sienten que es poco probable que alcancen un orgasmo, debido, por ejemplo, a que bebieron mucho en la fiesta.
-No quieren herir los sentimientos de su pareja.
-Buscan disimular su eyaculación precoz.
-Se sienten presionados por siempre llegar al orgasmo.
