13 Razones por las que el suicidio jamás es la salida

13 Razones por las que el suicidio jamás es la salida

Hannah de la serie ’13 reasons why’ se sintió acorralada y tomó una decisión que nadie debería... ¡sigue leyendo!

Al terminar de ver ‘13 reasons why’, dónde se narra la historia de Hannah y por qué decidió quitarse la vida, amigos míos comenzaron a escribirme: “me recordó a ti”. Y hasta cierto punto, a mí también me evocó a esa chica de 17 años que alguna vez fui: insegura, intensa, dramática, enamorada de la poesía, con pésima suerte con los hombres (esperen, no sé si estoy hablando de mi yo del pasado o del presente...), de complexión media o “llenita”, y que por más que se esfuerza en creer en la gente, se decepciona.

Sí. Sé lo que es que te hagan bullying. Sé lo que es que los chicos hagan listas y te incluyan en ellas, solo que a mí mis “amigos” me pusieron en la lista de “las más gordas” o “con más boobs”, y sé lo mal que se siente. Conozco lo que es tener una cita con alguien y besarlo, y que esa persona al día siguiente te desconozca y te haga fama de “fácil” cuando lo único que hubo fue un roce de labios, sé lo que es sentirme inadaptada, fuera de lugar, diferente y sobre todo, sola.

Los 17 fue el peor año de mi vida; mi familia estaba en crisis, uno de mis hermanos se había ido a vivir a otra ciudad y al otro le acaban de detectar diabetes y estuvo gravísimo en el hospital; le dejé de hablar por meses a mi papá y mi abuelo acababa de morir. Todo lo veía negro, pero en ese momento tan denso, fue cuando más me aferré a la vida. Y ahora, volteo al pasado y le agradezco a esa joven yo haber sobrevivido. ¿Por qué? Aquí 13 razones por las que vale la pena no quitarnos la vida:

1. Porque hay gente que se siente igual que tú

Sí, fui bulleada por varios chicos, pero encontré que en mi escuela había gente que se sentía igual que yo; esos que tenían acné, kilos extra, cero interés por la moda, que amaban la música triste o la poesía, que también se cuestionaban la realidad y buscaban un apoyo. Ellos se volvieron mi refugio, a la fecha son mis íntimos.

2. Porque los más bulleados luego se vuelven los más cool

Mientras estás en la prepa y sufres por tu impopularidad, te enfocas en encontrar consuelo en la música, el arte, la literatura... en pocas palabras: te conoces más a ti misma. Y cuando sales de ese infiernito llamado adolescencia, tienes más claro lo que quieres que aquellos cuya única meta era ser los más conocidos. Y eso, con los años, se refleja.

3. Porque aprendes a amar la soledad

Después de pasar por ese umbral del dolor en el que nadie te quiere o te acepta, sobrevives, y se los juro: deja de doler, y te sientes más fuerte y más segura de ti misma, pues descubres que la felicidad no está en el exterior, sino en tu capacidad de volver a levantarte.

4. Porque hasta las heridas más profundas cicatrizan

Hace unos años sufrí de abuso. Ese es tema para otro artículo, pero puedo decirles que fue un quiebre total. Y aunque sientes que el mundo se acaba, hay un bálsamo que en verdad cura todo: el tiempo. Y sobre todo, no quedarte callada, buscar ayuda profesional y grabarte en la cabeza: tú no lo provocaste. Jamás lo provocaste. Y no estás sola.

5. Porque la vida está llena de cosas bonitas

La música. Los conciertos de rock. El café después de despertar. Los pan cakes. Los perros. Los gatitos. Los viajes. Las largas caminatas. Las películas de arte. Las palomitas. El mar. Los postres. Girar la almohada al lado frío. Las mascarillas. Las series. Siempre hay algo en el día que puedes disfrutar y puede distraerte de lo malo que ocurre.

6. Porque adolescencia no es destino

Piénsalo: no serás siempre la misma persona que eres a tus 17. El acné desaparecerá, toda esa gente que te molesta se alejará y tú harás tu vida y verás que todo ese pasado ya no está, es parte de tu historia y puedes tomarlo como el momento en el que creciste como nunca.

7. Porque no estás sola

Siempre va a haber alguien; un familiar, un amigo, un profesor, un terapeuta... la misma Hannah hubiera tenido a sus papás si hubiera hablado con ellos. Atrévete a buscar el apoyo de gente mayor que ha pasado por lo mismo que tú y lo ha superado.

8. Porque el amor existe

Aún con el corazón roto, siempre habrá un Clay que te está pensando y que daría todo porque te sintieras mejor, solo que quizá no es ese chico popular y con cuadritos, sino el que trae sus audífonos y jamás deja de entregar una tarea. Abre los ojos a la gente que vale la pena e identifica a los que no, que siempre dan señales.

9. Porque en la prepa, nadie tiene verdaderos amigos

Es una edad en la que todos cambiamos y somos una bola de hormonas. En ese proceso, ¿cómo podemos establecer lazos que duren para siempre? Es normal que en este periodo, las personas entren y salgan de tu vida más rápido que un one hit wonder. Y aunque duele, con los años descubrirás que quien tiene que estar, estará, y no tienes que dejar de ser tú para retenerlos.

10. Porque hay gente con más problemas que tú

No hay problema pequeño, pero sí hay personas que atraviesan por asuntos muy dolorosos, como una enfermedad terminal, extrema pobreza o vivir en un país en guerra, y ellos quizá no tienen la oportunidad de cambiar de contexto. Por qué no, en lugar de enfocarte solo en lo que a ti te ocurre, ¿ves de qué manera puedes ayudar a los demás?

11. Porque eres única

Cliché. Lo sé. Pero es cierto: no hay nadie como tú, y no sabes lo que tú yo del futuro te tiene preparado: una vida llena de viajes, una carrera exitosa, un gran amor... ¿por qué no te das la oportunidad de descubrirlo?

12. Porque es sólo un momento de crisis

Cuando sientes que todo se pone negro, respira, pon música y llora todo lo que tengas que llorar. Lo más importante: desahógate: escribe un diario, pinta, graba una canción, haz un blog, haz ejercicio. Saca todo lo que tengas que sacar.

13. Porque la vida es difícil, pero aún así vale la pena

Y mereces darte una oportunidad. El corazón se te va a seguir rompiendo, la gente te va a seguir fallando, tus sueños quizá no se cumplirán del todo, pero siempre habrá algo o alguien que te robe una sonrisa o te demuestre que más allá del dolor, como dice Florence & The Machine, “it’s always darker before the dawn”.

So shake it out!

Ver: Self-Love: Cómo amar tu cuerpo en 3 simples pasos

También te puede gustar: